domingo, 29 de noviembre de 2009

NO CREÍ...



Definitivamente
algunas cosas pasan en el momento en que menos lo crees.... sabía que algun día iba a volver sonar el timbre de mi célular y al fijarme fuera ese mismo número que solamente una ves había hecho sonar mi teléfono célular... este día fueron más de 10 las que vibro y sono por culpa de ese número... sabía que algún día, pero no me imagine que justamente el día de hoy...

Me quede en casa porque no me apatecía ver mucha gente, no quería enfadarme escuchando ruído que el día de hoy mi cabeza no estaba dispuesta a tolerar, no me apetecía cansarme por sonreir sólo por quedar bien y que esa gente no se llevara una impresión de mí de ser amarga, porque realmente no lo soy... simplemente hoy mi mente se nublo al percartarme de que mi cumpleaños se acerca, me di cuenta de lo mucho que odio cumplir años, y vuelvo a decirlo, si existiera una maquina del tiempo me hubiera encantado regresar a la edad de 14 o 15 años, en los que realmente VIVI... en los que no había tantas obligaciones, en los que un problema que te perturbaba un día al día siguiente era algo totalmente insignificante, en los que creías que todo mundo era tu amigo y no te llegaban las decepciones por darte cuenta que de esos 10 amigos que según tu eran amigos, solo 1 o 2 lo eran realmente en ese momento no te importaba eso, un día estabas totalmente enamorada y al siguiente esa persona era la que más odiabas... maldita pero bendita adolescencia en donde un pensamiento formal era lo máximo... y obvio, no digo que ya no sea una adolescente con mis 18 años y próximamente 19 años... pero simplemente las cosas comienzan a verse desde otra perspectiva y así como duele que te rompan la ilusión del "niño Dios", duele darse cuenta de que el mundo no siempre gira en base a ti mismo... sino que tienes que abrir tu visión y darte cuenta de TODO lo demás que te rodea... y a veces duele, y más cuando tienes una estúpida visión de "primero los demás, despúes yo" alguna ves un psicólogo me dijo que iba a ser mi pesadilla toda mi vida sino estaba dispuesta a cambiar ese papel...

Así como dolio pedirle a mi madre que quería una comida por mi cumpleaños con mi familia, (cosa que jamás había pedido), y termino mandandome por donde vine, añadiendo que "ya me había dado un carro" como si para mi ese pedazo de aluminio me fuera más importante que ver a mi familia unida, cosa que no sucede a menudo. No me quedo más que sentir el golpe y cerrar lo ojos para que doliera un poco menos.

Intentaba que alguien me abrazara y me hiciera olvidar el momento, porque aunque se lee insignificante la acción o la situación, realmente me pego. Entristecí. Pero como siempre no tengo la maldita capacidad de decir "me siento mal, necesito un abrazo", intente que el se diera cuenta con mi relato o mi decisión de quedarme en casa, pero parece que no entiende de indirectas o más bien soy algo egoísta al querer que me cumpliera mi capricho... no lo sé... simplemente llore al darme cuenta de que una ves más no había o no podía llamarle a alguien para consolarme un poco.

Y taran... no me lo hubiera esperado. Pero sin querer la persona que menos me imagine, me puso en un mensaje de texto "me gustaría pasar a saludarte". El hecho de que alguien quisiera verme, aunque fuera por unos segundos, me trajo de vuelta.

LLegó. Pantalon de mezclilla ajustado, playera blanca, botas picudas blancas y una chamarra de mezclilla con una mezcla de color café, acento raro en su hablar, y una sorinsa como siempre.

"Traes los ojos rojos" por poco y me cacha. Aunque me creyo con facilidad que era porque justo antes de salir a recibirlo estaba en la computadora...

En busca de elotes que comer... dimos vueltas por alguna parte de la ciudad, sin éxito alguno. Terminamos cenando hot dogs, y riendo a todo lo que da... Tenía mucho tiempo sin conocer a alguien que me hiciera reír por su risa misma... realmente es demasiado contagiosa y con sus incoherencias, reí mucho más...

Juro que jamás hubiera imaginado, que él... hubiera alivianado mi sentir. En todo caso siempre creí que el poder se encontraba en mí hacía él, hoy me gano...y sin querer.

Que agradable es conocer gente... y como lo dijo mi primo hace días
"cada una de las personas que aprecen en tu vida, son para dejarte alguna lección"

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